Acaba de anunciarse la versión 1.0 de Gradle, un sistema de build para Java que en vez de basarse en un lenguaje declarativo como XML para describir el proceso de compilación y despliegue, se basa en un lenguaje procedural: Groovy. La filosofía detrás de Gradle es que para describir un proceso de compilación, que puede requerir realizar un proceso u otro dependiendo de distintos parámetros de configuración (si, por ejemplo, estamos en un entorno de desarrollo o de producción), o que puede requerir repetir múltiples veces una acción con distintos artefactos es mejor emplear un lenguaje de programación imperativo y no uno declarativo.
Aquí tenéis una descripción detallada de las novedades y funcionalidad de Gradle.
Aprovechemos la ocasión para hacer una pequeña encuesta sobre sistemas de build dentro de nuestra comunidad: