Google ha presentado recientemente su nueva creación: Android 4.4 KitKat, sistema operativo del que ya hemos destacado sus novedades más interesantes, sobretodo de cara a los desarrolladores. Esta vez, no obstante, nos gustaría argumentar un poco sobre las ventajas de KitKat, pero, ahora, enfocados en los usuarios, sí, en todos aquellos afortunados que sean capaces de actualizar a esta versión, tanto por vías legítimas, como por otras que no lo son.
KitKat se resume en tres cosas fundamentales: desempeño y rendimiento, funcionalidades nuevas respecto a versiones anteriores y, por último, cambios en la UI.
Respecto a lo primero, Google ha logrado revolucionar la blogósfera anunciando oficialmente que, esta nueva versión de Android incorporan mejoras importantes sobre la optimización del sistema en el hardware. Lo ha dicho en términos más o menos exactos: esta versión 4.4 podrá correr de forma fluida y aceptable en dispositivos con una memoria RAM de 512 MB. Esta es una gran noticia para el mercado de smartphones de gama baja que están clasificados bajo este tipo de hardware, más allá de que puedan o no actualizar oficialmente a esta versión. Esto no solamente incluye a este tipo de dispositivos: los de gama alta también se verán beneficiados de esta optimización, al ver un mejor desempeño de sus terminales que el que se tenía con Jelly Bean y anteriores. Google rompe el estereotipo de que se necesita un hardware más potente con cada nueva versión de SO con KitKat.
El bajo consumo de energía, sobretodo hablando de reproducción de audio (y consumo de sensores también), es otra de las grandes ventajas de esta nueva versión. Con ella, según las pruebas hechas por Google, el Nexus 5 puede llegar a reproducir hasta 60 horas de música antes de apagarse. Otros detalles menos precisos, afirman que se ha mejorado la respuesta táctil (haciéndola más rápida y precisa) y la multitarea, que ahora resulta mucho más fluida.
En cuanto a funcionalidades, empecemos a frotarnos las manos pues, aunque es una versión menor, trae nuevas cosas interesantes, como la posibilidad de grabar la pantalla (trae incluso una utilidad propia para hacerlo, según lo detallado en la página de desarrolladores), modo inmersivo para ver en pantalla totalmente completa mientras leemos un ebook, jugamos o vemos un vídeo, y la posibilidad de tener integrado en la aplicación Hangouts, el sistema de mensajes estándar. La gestión integrada del dispositivo permitirá administrar de forma remota el móvil, en caso de robo o pérdida. Hay cierta aceptable información sobre Android Device Manager (que es como se le conoce a esta función) en la web, que resultará útil para entender cómo funciona y cómo usarla.
Finalmente, se ha mejorado el teclado nativo con nuevas cosas, como Emojis, así como la aplicación del
teléfono, que ahora puede ayudarnos a llamar rápidamente a quien más lo hacemos. La estética no la dejamos de lado. KitKat trae interesantes novedades en cuando al diseño de la interfaz, que ahora ofrece barra de estado y navegación transparentes, si así apetece el usuario. Entre otras cosas, también se ha mejorado el reproductor multimedia, que puede permitir mostrar el arte de una canción en la pantalla de bloqueo. La vista preliminar de wallpapers es otra de los pequeños agregados en esta sección.
En definitiva, se trata de una nueva versión de Android que no margina a ningún dispositivo, sea de gama alta o baja. Por supuesto, sería ideal que todos pudiéramos actualizar a ella. Lastimosamente, los teléfonos más "anticuados" quedan descartados de esto, como ya sabemos, por las políticas de las operadoras y de los fabricantes. Esto no es un limitante definitivo, por supuesto. Las vías no oficiales en forma de ROMs están disponibles para todo aquel dispuesto a correr el riesgo de instalar una ROM no oficial de KitKat para su dispositivo. Por un sistema operativo más optimizado, que puede ofrecer mejor fluidez y nuevas funciones, sin tomar en cuenta el hardware en el que se desenvuelve, quizá vale la pena. Yo lo haría, sin duda alguna.